Una Propia Voz es una oportunidad para quienes no tienen experiencia previa y apuntan a trabajar de manera gradual el miedo a la exposición, y para quienes buscan profundizar la experiencia transitada en nuestro seminario de ocho clases. Las clases, de frecuencia semanal, tienen una duración de dos horas y están divididas en dos módulos. 

La primera parte dedicada a poner al cuerpo en disponibilidad, a través de estímulos musicales y propuestas lúdicas para habitar el espacio escénico, y un entrenamiento grupal; mientras que en el segundo módulo nos dedicamos a lo específico del taller. Al igual que en el seminario, proponemos comenzar desde una mínima exposición, avanzando con juegos y propuestas grupales para entrenar la desinhibición. También apuntamos a la exploración de distintos comportamientos a través de improvisaciones grupales para luego, en la siguiente instancia del taller, incorporar textos clásicos universales y contemporáneos. El propósito es recorrer fragmentos de distintos géneros dramáticos; de esta manera, trabajaremos por un lado la palabra enunciada para componer las voces de varios personajes enmarcadas en lo que las escenas nos proponen, como así también la expresividad del cuerpo.

Como en todos los seminarios que ofrecemos en nuestra escuela, el proceso, aunque grupal, es personalizado, por lo que la propuesta para llevar a cabo en la muestra final, en este caso, es variada. Entonces, en el trayecto final del taller, abordaremos escenas específicas con varios personajes, escenas en dúo e incluso monólogos para quienes les interese afrontar la exposición en escena de manera individual.